La ansiedad se trata de una emoción natural que se manifiesta en los seres humanos con el fin de activar la necesidad de reacción ante un estímulo amenazante. Por lo general, tiene connotaciones negativas para la sociedad, no obstante, es una manifestación del organismo ante la necesidad de supervivencia.
Por esta razón, los expertos de la salud mental se refieren a ella como una respuesta de “lucha o huida”, ya que se presenta cuando el cuerpo debe enfrentar un peligro inminente.
¿Qué es el trastorno de ansiedad?
El trastorno de ansiedad es un trastorno mental que se caracteriza por la presencia de síntomas intensos y persistentes que interfieren significativamente con la vida diaria de una persona. Estos síntomas pueden incluir preocupaciones excesivas o irracionales, miedo intenso, evitación de ciertas situaciones, síntomas físicos como palpitaciones, sudoración y temblores, y una sensación constante de tensión o nerviosismo.
Cada tipo de trastorno de ansiedad tiene características y síntomas específicos. Puede requerir diferentes enfoques de tratamiento.Existen diferentes tipos entre los más frecuentes podemos destacar los siguientes:
- Crisis de pánico o de ansiedad: aparece una sensación de miedo o terror sin ninguna razón aparente, puede durar desde algunos minutos hasta horas.
- Ansiedad generalizada: la persona que lo padece se preocupa en extremo por todo lo que sucede en su vida. Siendo los escenarios catastróficos los más comunes, aunque realmente no haya nada que indique que todo saldrá mal.
- Obsesiones: pensamientos recurrentes que generan ansiedad. El paciente es capaz de reconocer que estos son producto de su mente, pero no puede controlarlo.
- Estrés postraumático: en estos casos aparece tras la exposición a eventos traumáticos o estresantes.
- Fobias: se caracteriza por el temor irracional a algo que no representa ningún peligro real.
Mitos más comunes
Existen muchos mitos alrededor de este padecimiento, algunos son verdaderos, otros falsos. A continuación, hablaremos sobre los más comunes y si estos tienen alguna veracidad o simplemente son creencias provenientes de la desinformación.
Mito 1: Ocurre en personas con trastornos mentales
Falso: La ansiedad es una emoción normal que puede experimentar cualquier persona en situaciones estresantes o de incertidumbre. Puede ser una respuesta normal y adaptativa a situaciones estresantes y puede desaparecer una vez que la situación estresante ha pasado. Sin embargo, si es persistente, excesiva e interfiere significativamente en la vida diaria de una persona, puede ser un signo de un trastorno de nervisismo o de otra afección mental.
Trastorno de ansiedad generalizada (TAG): se caracteriza por una preocupación excesiva e irracional sobre diversas situaciones o eventos, incluso aquellos que no tienen una importancia real o que son poco probables. Las personas con TAG a menudo se sienten tensas, inquietas y nerviosas, y pueden tener dificultad para controlar sus preocupaciones.
Trastorno de pánico: se caracteriza por episodios intensos de miedo o terror. A menudo acompañados de síntomas físicos como palpitaciones, sudoración, temblores, falta de aire y mareos. Las personas con trastorno de pánico pueden tener miedo de tener otro ataque de pánico y evitar situaciones que puedan desencadenarlo.
Trastorno obsesivo-compulsivo (TOC): se caracteriza por pensamientos recurrentes y persistentes (obsesiones). Estos pensamientos y comportamientos pueden ser extremadamente disruptivos y pueden interferir con la vida diaria.
Trastorno de estrés postraumático (TEPT): se produce después de experimentar o presenciar un evento traumático, como una situación de violencia, abuso, un desastre natural o una guerra. Las personas con TEPT pueden experimentar recuerdos y flashbacks del evento, pesadillas, evitación de situaciones que les recuerden el evento y otros síntomas de agitación.
Fobias específicas: se caracterizan por un miedo intenso y persistente a un objeto o situación específicos, como a los animales, a volar, a las alturas o a los espacios cerrados. Las personas con fobias específicas pueden evitar las situaciones que les causan ansiedad, lo que puede interferir con su vida diaria.
Drogas o alcohol: el consumo en exceso de estas sustancias pueden generar o empeorar los cuadros de ansiedad.
Mito 2: No se supera
Falso. La ansiedad es una condición tratable y superable. Aunque puede ser difícil y requerir tiempo y esfuerzo, muchas personas pueden superarla con la ayuda adecuada y un enfoque terapéutico efectivo.
Existen diversas estrategias terapéuticas que pueden ayudar a las personas a manejar y superar este angustia, como la terapia cognitivo-conductual, la terapia de exposición y la terapia de aceptación y compromiso. Además, existen opciones de tratamiento médico, como los medicamentos ansiolíticos y antidepresivos, que pueden ayudar a reducir los síntomas.
Es importante tener en cuenta que cada persona es única y puede responder de manera diferente a los tratamientos. Por lo tanto, es importante trabajar con un profesional de la salud mental para encontrar el tratamiento adecuado para su situación individual.
Mito 3: Es peligrosa
Falso. La ansiedad por sí misma no es peligrosa, no daña ni afecta negativamente la salud física de la persona. El problema está cuando esta aparece sin ninguna razón específica y se vuelve un trastorno emocional. En ese momento se puede presentar malestares físicos y psicológicos que pueden impedir el correcto desenvolvimiento en el día a día.
Es común pensar que este padecimiento pueda generar infartos, derrames cerebrales o cualquier otro causante de muerte. Esto es falso, es necesario aclarar que esto no puede matar a nadie por sí solo.
En el caso de que a causa de un episodio nervioso se sufra de un infarto o alguna otra afección que ponga en peligro la vida de la persona, este se deberá a un problema de salud subyacente.
Mito 4: Es para personas débiles
Falso. Sufrir de trastorno de ansiedad no quiere decir que se sea una persona débil o con poca fuerza de voluntad. Este no es un padecimiento que se elige tener. De hecho, tener conciencia de que se necesita ayuda externa y pedirla para solucionar el problema habla de una persona con mucha fuerza y valor.
Mito 5: Tú puedes combatirla sola/o
Falso. Lo primero que hay que tener en cuenta es que las emociones son parte fundamental del funcionamiento del ser humano. Estas no se pueden controlar, pero sí se pueden regular. Para esto existen diferentes técnicas como la meditación, la respiración consciente, la relajación, y si bien pueden ayudar al tratamiento, esto no garantiza que se resuelva.
Por lo tanto, las personas que sufren de este trastorno deben acudir a especialistas que puedan tratar la enfermedad y ayudar a regular y controlar los sentimientos de miedo irracional, angustia y desesperación.
Mito 6: Los pensamientos negativos afectan tu cuerpo físico
Verdadero. Cuando una persona experimenta pensamientos negativos de ansiedad, su cuerpo puede liberar hormonas de estrés, como el cortisol y la adrenalina. Esto puede provocar síntomas físicos como sudoración, palpitaciones, tensión muscular y respiración rápida. Además, estos pensamientos pueden causar un aumento de la presión arterial y la frecuencia cardíaca, lo que puede llevar a un mayor riesgo de problemas cardiovasculares.
Además, los pensamientos negativos pueden afectar la calidad del sueño, lo que puede llevar a problemas de fatiga y cansancio crónico. También pueden disminuir el apetito y provocar problemas digestivos, como náuseas, diarrea y estreñimiento.
Mito 7: Siempre requiere tratamiento con medicamentos
Aunque los medicamentos pueden ser una parte efectiva del tratamiento para algunos casos de ansiedad, no son la única opción. La terapia cognitivo-conductual (TCC) es un enfoque comúnmente utilizado que ha demostrado ser efectivo para tratar la ansiedad. La TCC se enfoca en cambiar los patrones de pensamiento y comportamiento.
Mito 8: Se trata con psiquiatras
Si bien los psiquiatras pueden recetar medicamentos para la ansiedad, hay muchos otros profesionales de la salud mental que pueden ayudar en el tratamiento. Los psicólogos y los consejeros también pueden proporcionar terapia y apoyo.
Por lo tanto, es importante abordar los pensamientos negativos para prevenir estos efectos físicos y mejorar la calidad de vida.
Mito 9: Es una condición que solo afecta a los adultos
Puede afectar a personas de todas las edades, desde niños hasta adultos mayores. En los niños,se manifiesta como temores específicos, como el miedo a la oscuridad o a los extraños. En los adolescentes, se manifiesta como ansiedad social o trastornos de ansiedad generalizada.
Domina la ansiedad: Desmitificando creencias para recuperar el control
Explora con nosotros los mitos comunes sobre la ansiedad y descubre cómo superarlos con herramientas efectivas para recuperar el control sobre tu bienestar mental. Sumérgete en estrategias probadas para gestionar la ansiedad y encuentra paz en cada día.
¿Todos experimentamos ansiedad de la misma manera?
No, la ansiedad se manifiesta de manera única en cada persona. Puede variar en intensidad y síntomas.
¿La ansiedad siempre requiere tratamiento profesional?
No siempre, pero si la ansiedad afecta significativamente la vida diaria, buscar ayuda profesional es recomendable.
¿La ansiedad es curable?
Si bien puede no tener una «cura» definitiva, la ansiedad es tratable. Las terapias y estrategias de afrontamiento pueden marcar una gran diferencia.
Reflexiones
La ansiedad es una condición real y común que puede afectar a cualquier persona, independientemente de su edad, género o antecedentes. Al desmitificar algunos de los malentendidos comunes sobre la ansiedad, podemos ayudar a reducir el estigma y aumentar la conciencia sobre esta condición. Si usted o alguien que conoce está experimentando ansiedad, es importante buscar ayuda profesional.
Espero que este post te haya sido de mucha ayuda. Siempre contando contigo, te exhorto a las tres C: Comenta, Comparte y Compra. 😉
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