Las seis cualidades para convertirte en una persona carismática

El carisma es una cualidad magnética que atrae y cautiva a las personas. Las personas carismáticas tienen la capacidad de generar un impacto positivo en los demás, influenciar sus opiniones y crear conexiones significativas. Aunque puede parecer que el carisma es un rasgo innato, la realidad es que cualquiera puede desarrollar y cultivar estas cualidades para convertirse en una persona carismática.

En este artículo, exploraremos las seis cualidades esenciales que te ayudarán a desarrollar un carisma auténtico y duradero.

Todos en algún momento hemos deseado ser una persona carismática y queremos aprender a serlo con fervor. Si estás en este paquete, te tengo una buena noticia: es posible aprender a tener carisma.

Pero, antes de crear un contenido para ayudarte a gozar de esta cualidad, es necesario definir

¿Qué es ser carismático?

El carisma es esa habilidad que nos permite tener una conversación con otra persona e influir, cautivar y causar una buena impresión por medio de este intercambio verbal. Es decir, es el uso de la comunicación para transmitir una imagen positiva y tener un buen resultado.

Para ello no hacemos uso únicamente del contenido de nuestro diálogo, sino que nos apoyamos también en nuestro lenguaje corporal, nuestros gestos, la forma en que nos vestimos, etc.

Realmente es un conjunto de factores que se pueden controlar para influir tanto positivamente en los demás, como negativamente. Es cuestión de tener consciencia de su peso en una interacción social y usarlos a nuestro favor.

Por suerte para todo aquel que esté luchando para relacionarse con otros de forma fructífera, ya existen estudios con seis pasos específicos para mejorar en este campo; y aquí te los traemos:

Haz que las personas se sientan importantes con el Método SHR

No te asustes, no es algo complejo en lo que vayamos a pasar mucho tiempo estudiando. Sus siglas significan “Seen, Heard, Remembered”, que en español serían: visto, escuchado y recordado.

Su efectividad reside en su simplicidad. Y es que cuando se trata de relacionarnos con los demás, muchas veces lo hacemos de forma instintiva y prestamos poca atención a los puntos en los que se afinca este método.

  • Visto:

Debemos hacer contacto visual. Normalmente este no debe mantenerse de forma intermitente, pero tampoco evitar el contacto por mucho tiempo. El medio da una buena sensación a nuestro interlocutor.

Realiza un cumplido al otro: Esta acción siempre sienta una buena base para nuestra conversación y demuestra que observamos al otro, propio de una persona carismática.

  • Escuchado:

Realiza preguntas objetivas en base al tema de conversación que están manejando. Esto demuestra que estás interesado en la conversación.

La idea es que podamos mostrar que estamos presentes en el diálogo.

  • Recordado

Este punto hace mención a qué tanto recordamos de las conversaciones que estamos teniendo y, por ende, el seguimiento que estamos dispuestos a darle. Puedes hacerlo trayendo a la conversación nombres que se han mencionado anteriormente, temas que han tratado antes, etc.

Pausar no es tan transcendental. La regla del 30%

Esta regla puede significar un gran alivio para la mayoría de personas que sufren de ansiedad al estar ante una interacción social y les cuesta ser una persona carismática.

Según Charlie Houpert, utilizamos solamente el 30% de lo que nuestros oyentes están dispuestos a tolerar en una pausa sin atribuirlo a un error.

Es decir, cuando nos estamos comunicando y dejamos de hablar porque se nos olvidó lo que íbamos a decir o no encontramos el conector correcto para continuar, comenzamos a sentir presión tan solo a los dos segundos de silencio.

Sin embargo, se ha probado que el oyente está dispuesto a esperar hasta 7 u 9 segundos sin verlo como algo negativo. Estar conscientes del tamaño de esta brecha de tiempo, puede ayudarnos a ganar confianza a la hora de interactuar.

Afina tu lenguaje corporal. Regla del 7-38-55

Por suerte para nosotros, alguien ya hizo la tarea y es cuestión únicamente de ver y copiar. Las matemáticas están hechas y demuestran que la opinión que tendrá el otro y si es positiva o negativa está basada en estos porcentajes:
7% tus palabras.
38% tu tonalidad y tus gestos.
55% tu lenguaje corporal.

Nunca hay que olvidar que antes de ser intelectuales, fuimos seres primitivos. Esto aún está marcado en nosotros y aunque lo que decimos pueda ser ingenioso y oportuno, nuestro interlocutor examinará inconscientemente nuestro lenguaje corporal.

Si ve que estamos encorvados, con las manos en los bolsillos y mirada apagada, se sentirán incómodos y lo relacionarán con una actitud pasiva y desinteresada.

Pero no vayamos al otro extremo, un cuerpo rígido y brazos presionados con gestos fuertes, pueden intimidar al otro y crear desconfianza. Como si fueramos una amenaza.

En el medio encontraremos la combinación que llevará al otro a sentir que está ante alguien con confianza en sí mismo y que transmite buenas vibras. Espalda recta, sacamos los hombros, brazos en los costados y mirada atenta, pero amigable.

Usa el humor a tu favor para ser una persona carismática

Aunque no lo creas, las interacciones sociales implican un mínimo de tensión para todos, incluso para el más extrovertido.

Por eso, traer un poco de humor al ambiente siempre es valorado por los demás. Es el ingrediente perfecto para traer comodidad a la mesa y sentir a los demás a gusto con tu presencia. Podríamos comparar el humor con el azúcar en el mundo de la gastronomía y el chef es esa persona carismática.

Cero quejas o chismes

Cuando estamos afianzando una relación, las quejas pueden ser percibidas como una mala vibra. Hoy en día, podríamos percibirlo de parte de alguien como una conducta “tóxica”. Por ello, debemos intentar graduar lo que estamos por decir e intentar transmitir una buena opinión que pueda generar goce en los demás.

En el caso de traer chismes a la mesa, es preferible guardarlos para nosotros mismos. Pregúntate esto, ¿confiarías en alguien que habla cosas malas sobre otros? Probablemente no.

La regla de la sombra para ser una persona carismática

Esta regla probablemente te dejará boquiabierto. Y es que se basa en que no debemos ser perfectos y podemos mostrar en cierto grado (con criterio) nuestros defectos.

Sí, posiblemente pensarías que en un artículo sobre carisma, intentaremos mostrarnos como seres sin defecto alguno. Pero la verdad es que todos sabemos que eso no existe y mostrar nuestras carencias puede hacernos ver como humanos, algo que nuestro interlocutor apreciará. La presión de hablar con alguien que intenta aparentar no tener fallas es agotadora.

Incluso, es una buena ocasión para desempolvar nuestra capacidad de ser buenos comediantes y hacer unas cuantas bromas sobre nosotros mismos, ya que podemos medir si el sujeto se molestará (siendo nosotros mismos).

¿Puedo aprender a ser carismático si soy introvertido?

Sí, el carisma no está reservado solo para los extrovertidos. Las personas introvertidas pueden desarrollar un carisma auténtico al enfocarse en sus fortalezas, como su capacidad para escuchar y reflexionar antes de hablar.

¿El carisma es lo mismo que ser manipulador?

No, el carisma auténtico se basa en la honestidad y la conexión genuina con los demás. La manipulación, por otro lado, busca controlar o engañar a las personas para obtener beneficios personales.

¿Cómo puedo mantener un carisma auténtico?

Mantén la autenticidad en todas tus interacciones. No trates de ser alguien que no eres. La autenticidad es la clave para que tu carisma sea duradero y significativo.

Desarrollar el carisma no se trata de ser alguien que no eres, sino de cultivar cualidades auténticas que te permitan conectarte con los demás de manera significativa. Al incorporar confianza en ti mismo, empatía, comunicación efectiva, pasión y autenticidad en tu vida diaria, estarás en el camino para convertirte en una persona carismática.

Recuerda que el carisma no solo beneficia tus relaciones personales, sino que también puede abrir puertas en tu carrera y en todas las áreas de tu vida.

Ser una persona carismática te permite conseguir agrado y respeto, de tal forma que tus ideas se tienen en cuenta. Transmite competencia y cercanía.

Espero que este post te haya sido de mucha ayuda. Siempre contando contigo, te exhorto a las tres C: Comenta, Comparte y Compra. 😉

¡Gracias!