¿Cómo desarrollar el control de las emociones?

Quisiera empezar por una pregunta que muy pocas veces o quizás nunca te has hecho: Sabes regular tus pensamientos, sentimientos y acciones para poder lograr tus objetivos? Alguna vez has actuado con mucha rabia hacia una persona o situación creyendo que se la merece y después cuando estas con la mente fría te das cuenta que exagerastes, que la situación o la persona no merecía esa acción de tu parte? Pues si has actuado o peor sigues actuando de esa forma te invito a que desarrolles el control de tus emociones mediante la autorregulación.

¿Qué es la autorregulación?

Se entiende por autorregulación al control que una persona ejerce sobre sus emociones, sus acciones y sus pensamientos. Este proceso contribuye a que el individuo pueda cumplir con sus objetivos.

En otras palabras es el control de todas las emociones y procesos cotidianos, manejando con éxito situaciones difíciles de la vida. Llevándolo al plano terrenal pondré un ejemplo: Imagina que te enfadas con tu jefe y sientas tanta ira que cuando vas a punto de insultar, decides callar y no decir nada, aquí te autorregulaste porque decidistes no llevar el problema a mayor escala y evitar un conflicto.

Este es uno de los tantos ejemplos que pudiera darte donde puedes tener un control de tus emociones. Cada persona actúa diferente frente a determinadas situaciones en la vida y no todas tienen la capacidad de autorregularse. Cuando estas molesto o enojado es dificil de usar las habilidades de función ejecutivas porque permites que tus emociones te controlen. Al pasar esto, dejas de escuchar y no te concentras en el aprendizaje de lo que te está sucediendo.

Aprender a monitorear y manejar las emociones te permite conocer cuales son tus sentimientos fuertes y usar estrategias para calmarte.

Estrategia para el control las emociones

Autoconciencia: el autoconocimiento es la base para desarrollar la autorregulación. El conocimiento sobre nuestras características, puntos fuertes y débiles es vital en este proceso.

Respirar: respira, respira y respira tantas veces como sea necesario. Este es un tip sencillo pero poderoso. Cuando te concentras en tu respiración, todo aquello que te molestaba o simplemente le estabas dando mucha atención a algo o alguien que no lo ameritaba pierde totalmente el enfoque y comienzas a centrarte en ti mismo.

Establece metas y hazlas públicas: Cuando estableces autorregulación en una conducta (bajar de peso, graduarte, leer un libro, dejar de fumar, dejar de beber) es bueno compartirla con alguien más. Si quedas mal no es solamente contigo mismo, sino con tu red de compañeros de confianza que te apoyan en tus decisiones. Por tanto se te hace más difícil renunciar a tus metas.

Cuida tu rutina de sueño: Es importante que te tomes en serio dormir entre 7 u 8 horas. El sueño y la autorregulación son muy buenos amigos. No dormir lo suficiente puede sacarte de ella. 🙂

Pensamiento positivo: Detén tus pensamientos por un momento y reflexiona en la forma que estás pensando. Fíjate si no estás entrando en un bucle mental. Cambiando el enfoque de tus pensamientos a soluciones con optimismo cambiará gradualmente tu mente y tu alrededor.

Cambio de creencias: Identifica cuales son tus creencias limitantes, escríbelas en un papel, en el móvil, donde desees y al lado de cada creencia la reemplazas por una positiva y constructiva.

Meditar: medita, medita, medita. Haz de esto un hábito. Meditar 15 minutos después de levantarte y 15 minutos antes de acostarte. En ese tiempo tu mente está más receptiva. Puedes encontrar meditaciones guiadas en youtube.

Acudir a una persona profesional: Si necesitas ayuda siempre recuerda que tienes la opción de acudir a un profesional para ayudarte en algún proceso que requiere mayor trabajo.

Libros que te ayudan al control de las emociones

Palabras finales

Las personas con mayor inteligencia emocional tienden a presentar menos estados emocionales negativos. Es por eso que debes practicarla y hacerla parte de tu vida. Ser consciente de lo que nos pasa, no quejarnos, no juzgarnos, en vez de eso comprender y aceptar lo que está pasando es un paso para conocer y autorregular tus emociones.

Antes de reaccionar cuando estás enfurecido por algo o alguien, respira y espera a tener la mente fría, verás que el reaccionar no será el mismo que tenías desde el inicio. Habrá personas que tendrán una inteligencia emocional baja y harán cosas que te moleste o hieren, pero tu eres el único que puedes decidir si te afecta o no. Si permites que lo que haga o diga una persona te afecte, entonces le estás dando el poder de controlarte. 

Cuando estés furioso/a no hagas nada, solo respira profundo, dale tiempo a que tu cerebro controle la emoción, y puedas tomar mejores decisiones, tu paz es importante para ti y nada ni nadie puede desestabilizarla.

Todo te afectará en la vida a medida que tú le des importancia. Tú tienes el poder de sanarte. Si quieres un cambio en tu vida debes comenzar y terminar en ti. Adiestra tu mente. Recuerda: el que reacciona, pierde.

Siempre contando contigo, te exhorto a las tres C: Comenta, Comparte y Compra. 😉

¡Gracias!

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