Identifica los 9 tipos de personas con las que debes tener cuidado

Ayudar a los demás, nos puede hacer sentir plenos y satisfechos con nosotros mismos, no obstante, en ocasiones puede ser algo desgastante. No todas las personas con las que quieres ser bueno sentirán gratitud por tus buenas acciones para con ellos. En ocasiones, no es fácil identificarlas, sin embargo, para ayudarte, en este artículo te presentamos 9 tipos de personas a las que no deberías ayudar para preservar tu tranquilidad.

Tipos de personas que quizás no deberías ayudar

En el siguiente apartado, te dejamos una lista de algunos tipos de personas que quizás quieras dejar pasar cuando se trate de darle un destino a tus buenas acciones:

Personas que no asumen su responsabilidad

Hay persona que no quieren hacerse cargo de sus responsabilidades, y lo mejor que puedes hacer es alejarte de ellas. Existen muchas razones por las que las personas no quieren hacerse cargo de lo que les compete, algunas por ejemplo, temen sentir culpa por las consecuencias de sus acciones. Tratar de ser colaborativo con una persona de este tipo, es estar sujeto a tolerar quejas pero a la vez excusas. Con el tiempo notarás que no vale la pena ayudar a una persona incapaz de asumir su responsabilidad porque te sentirás desgastado.

Personas que creen que el mundo está en deuda con ellas

Si has lidiado con este tipo de personas, sabrás que no hay ayuda que valga para satisfacer sus expectativas. Una persona que piensa que el mundo le debe algo, a menudo sentirá que recibir ayuda es algo de lo que tú y quienes le rodean están obligados a lograr. No es fácil convivir con estos tipos de personas, y además de esto, ser agradecido no es uno de sus atributos. Tratar de ayudarlo generalmente derivará en una profunda frustración porque notarás que nada de lo que haces podrá ser merecedor de agradecimiento. Entonces, evitar tanto como te sea posible ayudar a estas personas te evitará experimentar estas emociones tan negativas.

Personas que se aíslan para no responsabilizarse con nadie

Aunque probablemente extiendas tu mano amiga sin esperar nada a cambio, muchas veces la reciprocidad forma parte de cualquier relación saludable. En este sentido, para evitar sentirse responsables contigo, muchas personas pueden aislarse después de recibir tu ayuda. Es comprensible que esto te genere molestia, pero se trata más de la otra persona que de ti. En ocasiones lo mejor que se te puede recomendar es que evites desgastarte y emplear tu tiempo en brindar apoyo a estos tipos de personas.

Personas que están enfocadas en ver el lado negativo de la vida

Bien se dice que no se puede ayudar a una persona que no quiere recibir ayuda, tratar de brindar apoyo a una persona que no puede cambiar su visión del mundo es el mejor ejemplo que podemos darte. Hay personas que tienen una perspectiva profundamente negativa de la vida, personas que a cualquier circunstancia, momento o acción le encuentran algo negativo. Cuando tratas de ayudarlas, a menudo es encontrarse con un muro de negatividad muy difícil de traspasar.

Personas que no tienen visión a futuro

Existen personas que parecieran estar ancladas al pasado, o personas que simplemente no tienen interés en avanzar. Por más ayuda que reciban de las personas que tienen alrededor, no tienen la habilidad de desarrollar sus propias capacidades para salir adelante. Se trata de personas que no tienen intención de progreso y que están enfocadas en sobrevivir en el presente, sin plantearse la posibilidad de tener un futuro mejor. Este es uno de los tipos de personas a las que deberías considerar brindar tu ayuda, ya que muy probablemente no veas resultados positivos con ellas.

Personas aprovechadas

Si existe un tipo de persona de la cual debes huir de inmediato, es de las personas aprovechadas. Escudadas con una fachada de víctima, se trata de personas que absorben tu energía y tus buenas intenciones. Básicamente se convierten en sanguijuelas que se aprovechan de tu ayuda y de tu bondad. Y valiéndose de tus buenas intenciones, pueden manipularte para conseguir lo que quieren sin tener que esforzarse por ello. Si quieres protegerte de estas personas, lo mejor que puedes hacer es reservarte tu ayuda para alguien que sí lo merezca.

Personas que viven bajo el velo del autoengaño

No hay mucho que puedas hacer para ayudar a una persona que se ha puesto el velo del autoengaño. Se trata de individuos que, pese a que tomen decisiones equivocadas, no son capaces de verlo, y están convencidos de que lo que han hecho es lo correcto. Terminarás por sentirte agotado, al tratar de emplear todas tus energías y buenas intenciones para ayudar a una persona que simplemente considera que no hay razón por la que deba ser ayudado. Existen personas que no se dan cuenta de las circunstancias en las que viven, y no aprecian la ayuda que reciben de los demás, las personas que viven autoengañadas son algunas de ellas.

Personas que no ven más allá de sus narices

Hay muchas personas que no admiten otra realidad que aquella que han creado en su mente, aquella que viven a diario y hacia la cual no permiten la entrada de factores externos presentes en el mundo exterior. ¿Vale la pena tratar de brindar una mano amiga a estos tipos de personas? Queda claro que no, será una inversión de esfuerzo y de tiempo en vano y, además, no recibirás agradecimiento por ello.

Personas que creen que el problema son quienes les rodean y no ellas

Si no quieres desperdiciar tu tiempo y tu esfuerzo, evita tratar de ayudar a personas que no se dan cuenta de que son una fuente de problemas. Se trata de individuos que están enfrascados en el hecho de que los problemas derivan de quienes les rodean y no pueden (o no quieren) darse cuenta de sus propios errores.

Tu paz mental también se merece un lugar en tu vida

Es normal que quieras de vez en cuando ayudar a los demás, pero también es importante que cuides tu tranquilidad. Ser bueno con quienes te rodean habla muy bien de ti, pero en ocasiones debes pensar en ti mismo antes de ser bueno con quienes están a tu alrededor.

Identifica los tipos de personas que son perjudicial con nuestros libros sobre relaciones saludables

En la vida, es fundamental establecer límites saludables y reconocer cuándo ayudar a alguien puede tener un impacto negativo en tu bienestar. En esta sección, te presentamos una colección de libros que te ayudarán a identificar los 9 tipos de personas que no deberías ayudar. Aprende a proteger tu energía y establecer relaciones saludables.

¿Qué debo hacer si ya he estado ayudando a una de estos tipos de personas?

Si has estado ayudando a alguien y ahora te das cuenta de que no deberías, lo más importante es establecer límites claros y comunicar tus límites a esa persona. Puede ser un proceso difícil, pero es necesario para proteger tu bienestar.

¿Cómo puedo ayudar de manera segura a alguien que necesita ayuda pero cae en una de estas categorías?

Puedes ofrecer ayuda de manera limitada y con condiciones. Por ejemplo, puedes proporcionar recursos o información en lugar de asistencia directa. Sin embargo, establece límites claros desde el principio.

¿Es incorrecto ayudar a las personas en general?

No, ayudar a los demás es una acción noble y necesaria para una sociedad compasiva. Sin embargo, es importante ser selectivo en cómo y a quién ayudas para proteger tu propia salud y bienestar.

Palabras Finales

Ayudar a los demás es una virtud, pero también es esencial reconocer cuándo tu ayuda podría ser perjudicial. Al establecer límites y ser selectivo en a quién decides ayudar, puedes mantener un equilibrio saludable entre el deseo de contribuir al bienestar de los demás y la necesidad de proteger tu propio bienestar. Recuerda que tu seguridad y bienestar son fundamentales.

Espero que este post te haya sido de mucha ayuda. Siempre contando contigo, te exhorto a las tres C: Comenta, Comparte y Compra. 😉

¡Gracias!